Vistas de página en total

Bienvenidos

Quería dar la bienvenida y las gracias, a todos aquellos que visiten mi blog.
Agradecería el comentar alguna entrada, simplemente para saber lo que puedo mejorar.

¡Muchas gracias!
¡Un beso!

martes, 11 de julio de 2017

Salidas nocturnas.




Me metí en el baño de nuevo. Necesitaba sentir mas adrenalina por mi cuerpo. Quería sentir como agujereaba un poco mas mi brazo. No se cómo me sostenía, a ratos recuerdo que la musica abrumaba mis oídos, como ensordeciéndolos haciéndome creer que estaba en una caja. Pero si gritaba, se me pasaba esa sensación. Salí del baño con una buena dosis extra, dispuesta a darlo todo en la pista. Estaba claro que el amor de mi vida no iba a encontrarlo en ninguna pista de baile a las cinco de la mañana, pero quizá me llevaba entre una y tres alegrías en la noche, sin contar la mía propia. Sentir cada cuerpo, sin nunca importar quién o qué fuera... En esos momentos, nada importa.
A la mañana siguiente, nunca recordaba como había llegado. A penas recuerdo más que unos cuantos orgasmos en una misma noche en el baño del bar y, bueno, mis cosas.
Un día, empecé a recordar, cuando a la mañana siguiente amanecí al lado de lo que parecía un chico un poco diferente al resto. La noche anterior, lo recuerdo todo un poco nublado, pero ante mis ojos se puso, con aquél rostro angelical y aquella locura nocturna. Ese traje que le hacía tan diferente al resto, era todo lo que nunca esperé encontrar en un chico. Día tras día, iba conociéndolo, cometíamos locuras juntos, pero aunque había sexo, nunca se hablaba de amor. El parecía un poco mas 'light' que yo, ya que solo le gustaba oler mi perfume, y decía que sólo era conmigo.
Decía que era diabético, a lo cual le bromeaba pues inyectaba donde no era. Mas adelante, empecé a notar un cambio de humor, que me dio a pensar, su voz, no me terminaba de sonar la misma y su intensidad aumentó para todo.
No quise indagar, pero poco a poco se fue soltando. Aunque ya íbamos menos de fiesta juntos, y yo, seguía viéndome con cada persona que me viera en gana, así como objetivo de seguir a la mañana siguiente recordando únicamente los orgasmos. El tiempo pasaba, él, se sincero conmigo. Me dijo que estaba en un tratamiento, su nombre es Josan, antes se llamaba Rocío. Sus padres no lo habían terminado de entender, pero gracias a todo lo que manejó, pudo hacer su mayor sueño realidad. Admiré su valentía, congratulé la misma, y me digne a abrazarle como si no hubiera un mañana, entendiendo por qué me había acercado aquella noche a él.
Le mire a los ojos, de la forma mas profunda que nunca había mirado a nadie, y encontré lo que siempre habia temido. El me miro de la misma forma, y de aquella forma, nos convertimos en uno haciendo el amor por primera vez con el, y en general, en mi vida. Encontré uno de los mayores orgasmos.
Pasábamos horas en su casa, no importaba donde, por todo sitio donde estuviéramos, dejábamos huella. No quedaba rincón por descubrir en la casa. La confianza crecía, allí no me faltaba de nada.
Un día, me confesó que estaba enamorado de mí. Pero que tenia que confesarme algo, algo que quizá no pudiera sorprenderme, me confesó lo que en realidad era lo que el llamaba insulina ... me convirtió en una adicta, compartiendolo con él,todo era perfecto... Mas intensidad, mas amor, mas sentimiento ... Aunque, no duró mucho cuando mi cuerpo empezó a resentir. Él, me cuidaba... Hacía todo lo que necesitara y quisiera... Prácticamente estaba a mis pies.
Un dia, ocurrió lo que nunca habia podido imaginar, y menos en menos de un año de relación. Me llevó a todo sitio inolvidable en la vida en un mismo dia y, al final de este, me pidió matrimonio. No pude negarme a estar con ese hombre tan perfecto que la vida me había dado. Me encontré con el, con su alma, con el mas profundo yo, y, con unas defensas muy bajas que provocaban mi enfermedad, pero nunca quise ir a revisión. Él me cuidaba, ¿qué más quería?
Todo paso feliz hasta cumplir casi los dos años de matrimonio, hasta que de repente me encontré sola en la casa, con una nota en la sala de estar, y un sobre al lado.
'No era mi intención provocar este mal en ti, siento haberte jodido la vida. Me voy, no me busques, no me encontrarás. No quieras saber de mí, voy a desaparecer, nunca me lo perdonarás, y si lo haces, pronto estaremos juntos en el mas allá. Hace siete años que soy positivo en VIH, y cuando te conocí la primera noche... No todo salió como tu ex quería... La cagué y me enamoré, y por eso te he dado lo mejor que he podido de mi, pero no puedo más, te he jodido la vida y mereces pasar lo que te quede de tiempo con personas que no sean tan mierdas como yo. En este sobre están las pruebas, mi gravedad está al límite. Espero que no te afecte tanto como a mí. No quiero que me recuerdes de esta forma, pero me lo merezco. Ojalá algun dia puedas perdonarme. Me merezco la muerte y alla voy a buscarla como castigo por haberte condenado'
Fue la última noticia que supe de el en vida. Estaba sola, no sabia que hacer. Me sentia mal, tenia frio, mareo, empece a sentir delirios. No sabia que hacer. Me fui a su cajon y cogí todo lo que encontre. Empecé a esnifar, pinchar, fumar.... Y cuando abrí los ojos...
Ahí estaba el, en la misma habitación de u.c.i que yo. Me estaba mirando mientras se desangraba. Ante sus ojos quedó el recuerdo de verme morir.

No hay comentarios: